En 1956, Edwina Froehlich (Nueva York, 1915) y otras seis mujeres se reunieron en un parque para compartir información sobre cómo amamantar a sus bebés. De aquella reunión improvisada, en una época en la que los niños se alimentaban con fórmulas embotelladas, nació una de las organizaciones promotoras de la lactancia materna más influyente del mundo, la Liga de la Leche.
Su muerte se produjo dos semanas después de sufrir un accidente cerebrovascular (un ictus), tal y como ha informado uno de sus tres hijos, Paul. Los otros dos, Peter y David, residen en Illinois, el estado en el que su madre (nacida en el barrio neoyorquino del Bronx en 1915) estudió, se casó y desarrolló toda su actividad a favor de la leche materna.
Edwina Hearn (su apellido de soltera) contrajo matrimonio con John Francis Froehlich cuando tenía ya 30 años y tuvo su primer hijo dos años más tarde, una edad más tardía que la de sus compatriotas de aquella época. Además, al contrario que muchas de sus coetáneas, Edwina decidió dar a luz en su casa en lugar de en el hospital.
Los pediatras de la época desconocían aún todas las propiedades beneficiosas de la leche natural y la mayoría animaba a sus pacientes a alimentar a sus bebés con preparados lácteos infantiles. Se calcula que sólo el 18% de las mujeres amamantaban a sus bebés entonces. "Solíamos decirles a las madres que los tres principales obstáculos contra el amamantamiento eran los médicos, los hospitales y la presión social", asegura otra de las co-fundadoras de la Liga, Mary White.
De hecho, estas mujeres decidieron evitar la expresión 'dar el pecho' para el nombre de su organización, "porque en aquella época esa no era una palabra que se viese impresa habitualmente". Por eso, apostaron incluso por la palabra leche en español: La Leche League International. Poco después de aquella reunión en el parque (a la que siguieron encuentros con mujeres que celebraba en su propia casa), puso en marcha una línea telefónica para atender las dudas de las madres en cuestiones de lactancia. "No había información al respecto, las mujeres ni siquiera hablaban del tema", reconoce otra de las pioneras, Marian Thompson.
Froehlich escribió en 1963 'El Femenino Arte de la Lactancia', un libro que ha vendido más de dos millones de ejemplares desde entonces y que ha sido traducido a ocho idiomas, además de al lenguaje Braille. La fallecida ha donado su cuerpo a la Universidad de Illinois para seguir sirviendo a la ciencia.
VIA | Mamas y Bebes Blog
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